El caballo de Troya - Teórico 3

Explicar qué es lo que falló en el cuento y qué sucedió para que la historia tuviera ese desenlace.

 

El cuento, de ciencia ficción, comienza con unos amables visitantes interestelares; la raza de los Kanamitas.  Son recibidos por las Naciones Unidas donde tres de ellos como delegados de la especie extraterrestre informan su misión a los gobiernos terrícolas. Ofrecían a la humanidad su increíble desarrollo tecnológico, suficiente para vivir en paz sin sufrimientos innecesarios como el hambre ni las enfermedades. Los humanos luego de hacerles minuciosos exámenes para saber si sus intenciones eran reales aceptan. 

Todo parecía andar de maravillas, los humanos se encontraban feliz sin mencionar que estaban más fuertes y robustos, parecía un mundo feliz y contento pero escondía un gran secreto. Peter, traductor de la O.N.U, observa como uno de los embajadores kanamitas olvida un libro que llevaba siempre consigo y rumbo a un viaje espacial de intercambio cultural para visitar el planeta de la generosa especie encuentra a su compañero, Gregory. Ambos curiosos acerca del extraño idioma de sus visitantes, decidieron estudiarlo. La historia acaba cuando el experto en lingüística logra descifrar el título del libro, se llamaba "Servir al hombre" y se trataba de una receta de cocina.   

Para comenzar fue muy fácil para los humanos malinterpretar a los Kanamitas porque ambas culturas no compartían el código lingüístico, hablaban en idiomas totalmente diferentes y para nada parecidos. Gracias a las traducciones lograron entender el esquema situacional de los visitantes tomando como indicadores los conceptos de paz y felicidad sin embargo falló el código ideológico del hombre. Allí es donde los extraterrestres intentan conocer nuestro código sociocultural, como nos desenvolvemos en nuestro mundo y de qué manera atraernos hacia su plan pero dos terrícolas se interponen al interpretar correctamente su lengua. Todo el tiempo en la Tierra su misión siempre fue preparar a los seres humanos para comerlos. Entendemos que en su sistema de creencias la intención de hacerlos felices, fuertes y "gorditos" no era más que seguir las instrucciones de un libro de receta para que sus carnes sean aún más tiernas y ricas  de comerlas.